Fernando Tomás Pérez González nace en 1956 en Badajoz, donde tendrá un encuentro temprano con las letras gracias a su padre, el escritor Fernando Pérez Marqués. Tras cursar estudios de Historia en la Universidad de Sevilla, obtiene la licenciatura en Filosofía por la Universidad Complutense y, en 1998, el doctorado cum laude en Filosofía por la Universidad Autónoma de Madrid, con una tesis sobre el pensamiento de José Álvarez Guerra que será finalista del Premio Nacional a la mejor tesis doctoral de ese año. Durante los primeros años de su vida adulta ejerce como profesor de Filosofía en varios institutos a la vez que se dedica a la investigación historiográfica (centrándose en la recepción social de las ideas en el contexto extremeño), publicando ensayos monográficos tales como La introducción del darwinismo en la Extremadura decimonónica (Cáceres, 1987) Genealogía extremeña de Antonio Machado. Estudios sobre Álvarez Guerra (junto a Diego Núñez, Cáceres, 1989) y Tres filósofos en el cajón (Mérida, 1991), entre otros, dando a prensa varios artículos y comisariando varias exposiciones. En 1995 es nombrado Director de la Editora Regional de Extremadura. Esta labor la desempeñará durante 10 años, creando y afianzando junto a sus colaboradores colecciones nuevas como La gaveta (que le debe su nombre y su concepción), Ensayo literario, Poesía y La Biblioteca de Barcarrota (que existe, en gran medida, gracias en su empeño a la hora de adquirir ese fondo para evitar que cayera en manos privadas, y a su convencimiento de que sólo los especialistas de mayor rigor debían intervenir en sus ediciones). Gracias ese trabajo, la Editora alcanza una proyección desconocida en una editorial pública de esas características (ninguna otra, hasta entonces, había merecido tantas reseñas en medios de ámbito nacional). Entretanto, y hasta su muerte, Fernando Tomás prosiguió sus investigaciones, que dará a conocer en dos obras de publicación póstuma: su gran ensayo de historia del pensamiento y biografía El pensamiento de José Álvarez Guerra (Editora Regional de Extremadura, 2007) y el volumen de Artículos y ensayos (UNEX, 2013), en el que se recogen sus textos publicados en prensa y volúmenes colectivos, como el destacado prólogo al Catálogo Extremadura en sus páginas. Del papel a la Web, un texto fundamental, "La Ilustración pasa en Berlina". Este recorrido a la vida letrada de Extremadura durante casi tres siglos (XVIII-XX), el último texto que terminó, ofrece un resumen ejemplar de los importantes logros de Fernando Tomás Pérez González en el campo del ensayo, así como representa una de las mejores muestras del rigor intelectual y la solidez de su escritura.

 

Libros

• La introducción del darwinismo en la Extremadura decimonónica, Cáceres, Institución Cultural “El Brocense”, 1987

• Genealogía Extremeña de Antonio Machado (en colaboración con Diego Núñez), Cáceres, Separata de “Alcántara”, nº 18, Institución Cultural “El Brocense”, 1989

• Los orígenes de la Enseñanza Media. Badajoz, siglo XIX (Coordinación), Cáceres, Diputación Provincial, 1990.

• Tres filósofos en el cajón, Mérida, Editora Regional de Extremadura, colección “La Centena”, nº 56, 1991

• Juan Álvarez Guerra. Ciencia y Conciencia Agronómica, Mérida, Editora Regional de Extremadura, colección “Cuadernos Populares”, nº 52, 1995

• Discurso original sobre las utilidades de las ciencias que han de enseñarse por José Alonso de Quintanilla (Edición e introducción), Salamanca, Edita: Caja Salamanca. 1996

• Joaquín Sama y la Institución Libre Enseñanza (edición).Mérida, Editora Regional de Extremadura. Colección: Actas/Documentos.  1997.

• Introducción (“El Reformismo Regeneracionista en Extremadura y la Crisis del 98”, pp. 9-69), edición y notas de España sin sus Colonias, de Florencio León Gutiérrez – , Cáceres, Cicon Ediciones/ Los Hechos de la Memoria, 1999

• El pensamiento de José Álvarez Guerra, Mérida, Editora Regional de Extremadura. Colección Estudio, 2007

Publicaciones en revistas   

• “Vida y obra de José Álvarez Guerra”. Alcántara, Cáceres,  Época III. Nº 18, pp. 7-26, Institución Cultural “El Brocense”, septiembre-diciembre 1989.
 • “Marcelino Calero Portocarrero un editor zafrense” Revista de Feria de Zafra 1991

• “¿Quién fue Ventura Reyes Prosper?”. Aritmos, Noviembre de 1991.

• “La enseñanza de las matemáticas en Cáceres hace dos siglos”.  Aritmos, Mayo 1992.

• “José Segundo Flórez, un albacea de Augusto Comte”. Revista de Extremadura, nº 9, pp.53-62, Cáceres, sept.- dic.1992

• “El trienio Liberal en Zafra (según la correspondencia del Ducado de Feria)”. Trienio. Ilustración y Liberalismo, nº 21, pp. 129-151, Madrid, mayo 1993

• “Enseñanza e Ilustración en Extremadura”. Alcántara, Época III, Nº 29, pp. 7-35, Cáceres, mayo-agosto 1993 y Separata

• “Carta blanca sobre una leyenda negra”. Revista de Extremadura, nº 12, Segunda Época, pp. 143-145, Cáceres, septiembre-diciembre, 1993

• “Francisco Javier Álvarez. Dictados agronómicos e ideas políticas”. Revista de Estudios Extremeños. T. L, nº I, enero-abril, pp. 181-204, Badajoz, 1994

• “Crítica de la razón narrativa y otros escolios”. El Urogallo. Extremadura. Diciembre 1994

• “Últimas lecturas”, Gacetilla de la U.B.Ex., nº 7, pág. 4, Badajoz, 1994

• “El libro extremeño en la enseñanza. Una Historia con futuro”, ponencia en las Jornadas sobre el Libro en Extremadura, Editora Regional de Extremadura, Mérida 1994

• “Intento de fundar en Zafra una sociedad Económica” Ponencia del Congreso  Conmemorativo del VI Centenario del Señorío de Feria (1394-1994), Abril 1994,  Bloque II “Los tiempos Modernos”

• “Enseñanza y liberalismo: Las universidades de provincia en Extremadura durante el Trienio Liberal”. Trienio. Ilustración y Liberalism, nº 25, pp.85-133, Madrid, mayo 1995

• “Los Periódicos y la literatura efímera como fuentes para la historia del pensamiento español”.  El Basilisco, nº 21, pp. 28-30, Oviedo,1996

• “A vuelta con los libros”. QAZRIS. Agosto-Octubre 1996

• “Leandro de Santibáñez, un ilustrado extremeño lector de Mirabeau”.  Revista de Extremadura, nº 19, pp. 123-142, Cáceres, enero-abril 1996

• “Una reforma educativa de 1822”, en: José Alonso de Quintanilla: Discurso Inaugural sobre las utilidades de las ciencias que han de enseñarse en esta nueva Universidad de Segunda Enseñanza de la provincia de Cáceres, 1822. Estudio preliminar de Alberto Gil Novales y Fernando Tomás Pérez González, edición de Fernando Tomás Pérez González, IB Norba Caesarina y Caja Salamanca, pp. 33-52, Cáceres, 1996

• Colaboración [“Máximo Fuertes Acevedo”, etc.] en el “Dictionnaire de Darwinisme et de l´Évolution”, de Patrick Tort, Presses Universitaires de France, 3 vol., 1996

•  “Intento de fundar en Zafra una Sociedad Económica”, en: Actas del Congreso conmemorativo del VI centenario del Señorío de Feria (1394-1994), pp. 97-100, Editora Regional de Extremadura, Mérida, 1996

• “Controversias teóricas en torno a la educación en valores” Cuadernos Cives de información y documentación, nº 4.1996.

• “El elemento Hebraico y la Biblioteca de Bancarrota”. Revista de Estudios Extremeños. Diputación de Badajoz. 1996 (Coautor)

•”Hitos del Reformismo Educativo en Extremadura”, ponencia en el Congreso “Joaquín Sama y la Institución Libre de Enseñanza en Extremadura”, (Enero 1995) – Actas, E.R.E., pp. 85-90, Mérida, 1997

• “La Biblioteca de Bancarrota”. Revista Con Ñ. Revista de Cultura Hispanoamericana. 1997

• “El Pensamiento en Extremadura durante el tránsito del siglo XIX al XX”. Revista de Estudios Extremeños, T. LIV, nº 1, pp. 151-205, Badajoz, enero-abril 1998

• “La opinión pública extremeña ante la crisis del 98”. Revista Con Ñ, nº 3, pp. 40-46, CEXECI, Cáceres, julio 1998

• “Badajoz y la recepción del pensamiento moderno en Extremadura”. Apuntes para la Historia de la ciudad de Badajoz, pp. 161-164, Editora Regional de Extremadura,  Mérida, 1999

• “Reivindicaciones políticas de la mujer en los orígenes de la revolución liberal española” (con A. Fernández Blasco). Actas del  “Congreso sobre la Revolución Liberal Española”, Madrid, abril 1999

• “El Ensayo en Extremadura (género y confección)”. Revista de Extremadura, nº 28, pp.155-176, Cáceres, enero-diciembre 2000

• “El pensamiento de José Álvarez Guerra” (Resumen de la Tesis Doctoral, 1998), Universidad Autónoma de Madrid, Madrid, 2000

• “Pasado y presente de la edición en Extremadura”. Revista Con Ñ, nº 9-10, pp. 44-49, Cáceres, 2000

• “Azorín en Santa Marta. Alegoría en la escuela [El maestro]. Un caballero inactual [El escritor]” (en colaboración con Isabel Mª Pérez). Tierra de Barros. Elogio del horizonte. Diputación Provincial de Badajoz, Badajoz 2002. [reeditado en el Boletín de la Real Academia de Extremadura, Tomo XII, pp. 61-74, Cáceres, 2002 ]

• “Una época convulsa: Nueva conspiración contra Godoy”, en: Actas del Congreso “Manuel Godoy y su Tiempo” (Edición, junto con Miguel Ángel Melón y Emilio La Parra), Vol. II, pp. 425-444, E.R.E., Mérida, 2003

• “Ortega Muñoz en el crisol del tiempo”. Catálogo de la Exposición de la Obra de Ortega Muñoz en el MEIAC, Badajoz, mayo de 2004.

• “Extremadura en sus páginas“, Catálogo y Textos (con Juan Gil Hernández), de la exposición “Extremadura en sus páginas: del papel a la web“, Junta de Extremadura, Consejería de Cultura, Badajoz, 2 vol., 2005

• “Coordenadas de la Edición en Extremadura”. Boletín del Observatorio del Libro en Extremadura. 2005

 

Publicaciones en prensa
• “Los dos primeros periódicos de Cáceres”,  HOY, 27-11-1994, pág. 12

• “El elemento hebraico y la Biblioteca de Bancarrota”. HOY, febrero 1996 (en colaboración con Fernando Serrano Mangas)

• “Creación literaria y política cultura”. El Periódico Extremadura, Agosto 1996.

• “Primeras lecturas”. El Periódico Extremadura, febrero 1998

• “El libro, especie protegida”.  HOY, abril 1998

• “El libro a las puertas del siglo XXI”.  HOY, abril 1999

• “Día del Libro: Apague el televisor”. HOY, abril 2000

• “Cuentas rendidas”. El Periódico Extremadura, noviembre 2000

• “Promoción pública de un hábito privado”. El Periódico Extremadura, abril 2001

• “Académicos de Argamasilla”.  HOY, Mayo, 2005

 

Publicaciones en internet

 

 

• “Las cosas del campo” www.perezmarqués.com. Septiembre 2004.

BALTANÁS, Enrique.  “José Álvarez Guerra”, en Los primeros liberales españoles.  La aportación de Extremadura. 1810-1854, [Biografías] Edición Coordinada por José María Lama. Departamento de Publicaciones de la Diputación de Badajoz, año 2012

-CERCAS, Javier. “La revolución silenciosa”, en  Espacio/Espaço escrito, nº 27 y 28, Badajoz, noviembre 2009, pgs. 215-217

-CONTE, Rafael.   “En memoria de Fernando Tomás Pérez. Un filósofo en política a través de la literatura”, en Espacio/Espaço escrito, nº 27 y 28, Badajoz, noviembre 2009, pgs. 211,212

-CORRALES, José María. “Darwin y Extremadura”, en El Periódico Extremadura, 22 de diciembre de 2009

-GIBSON, Ian.  cita de “Juan Álvarez Guerra. Ciencia y conciencia agronómica” en Bibliografía esencial consultada de Ligero de equipaje, Ed. Aguilar, Madrid, 2006, pag. 732

- GIL NOVALES, Alberto. “A propósito de educación y cultura en el liberalismo temprano. Homenaje a Fernando Tomás Pérez González”, en Revista de Historia, vol. 18,  2005

-HIDALGO, Gonzalo. “Gaveta de Gavetas”. Texto de la presentación de «Gaveta de gavetas», Feria del Libro de Badajoz en Mayo de 2006

-HURTADO URRUTIA, Miguel .”Recordando a Fernando Tomás Pérez González”, en HOY 13 de Noviembre de 2005

- LAMA, Miguel Ángel. “Página  Nueva para Fernando Tomás Pérez”, en ABC, 26 de agosto de 2006

- LAMA, Miguel Ángel. “A propósito de los Artículos y Ensayos de Fernando T. Pérez con motivo de su presentación”

-MARTÍNEZ DE PISÓN, Ignacio. “Evocación de Fernando”, en Espacio/Espaço escrito, nº 27 y 28, Badajoz, noviembre 2009, pg. 213

- NUÑEZ, Diego. “In Memoriam Fernando T. Pérez González”  en Revista de Hispanismo Filosófico, 2006

-RICO, Francisco.  “El «Rucio» de Sancho, En memoria de Fernando Pérez”,  en  Espacio/Espaço escrito, nº 27 y 28, Badajoz, noviembre 2009, pgs. 219-223

-RODRÍGUEZ MARCOS, Julián. “Dos días de agosto”.  Cultivos, Editorial Mondadori, Barcelona 2008.

-RODRÍGUEZ, Javier. “Fernando  Tomás Pérez González, Ensayista y Editor”, en EL PAÍS, 30 de Septiembre de 2005

- RUIZ, Elisa. Presentación  de  El pensamiento de  José Álvarez Guerra, texto leído en la Biblioteca Nacional, Madrid, 22 de marzo de 2007

- SÁEZ DELGADO, Antonio. “Fernando Tomás Pérez González”, en LITERATURA EN EXTREMADURA, 1984-2009, III. TEATRO Y ENSAYO, Editora Regional de Extremadura, 2010, pags. 443-460

- SÁEZ DELGADO, Luís. “Artículos y ensayos de Fernando T. Pérez González”, texto de  la presentación en la Feria del Libro de Badajoz, Mayo 2013

- SANTIAGO CASTELO, José Manuel.   LA “Elegía a Fernando Pérez”,  en Quilombo,  Ed. Point de Lunettes, Sevilla 2008

-TRAPIELLO, Andrés.  “En la muerte de Fernando Pérez”, en Gaveta de Gavetas,  Editora Regional de Extremadura, 2006

-TRAPIELLO, Andrés. Narración sobre FTPG en “Seré duda”, Col. Salón de los pasos perdidos, Ed. Pre-Textos, 2015, pp. 420-422

- VALVERDE,  Álvaro. “Adión, Fenando” en  HOY y ABC, Agosto de 2005

- VALVERDE,  Álvaro. ”Homenaje in Memorian, Fernando Pérez González”, en  Revista de Estudios Extremeños,   Septiembre-Diciembre 2005

- VALVERDE  Álvaro. “Homenaje a un editor”  en Gaveta de Gavetas. Editora Regional de Extremadura, 2006

-ZAMBRANO,   José Antonio.  “Juego de voz”. HOY, 28 de  Agosto de 2005

De "La Ilustración pasa en berlina"

 

PRIMERAS EDITORIALES

 

Durante el Antiguo Régimen el autor se halló a merced de los abusos del impresor-librero, que desarrollaba su labor bajo “privilegio real”. Poco a poco fue cambiando esta situación, hasta que en 1813 las Cortes de Cádiz reconocieron la “propiedad literaria” en tanto que derecho del autor y no como una gracia concedida por el rey. Finalmente, la “Ley de la propiedad literaria” de 1847 estableció con detalle los límites y salvaguardas de la propiedad intelectual, justo en un momento en el que los libros entraban de lleno en el mercado de la producción capitalista. Frente a un panorama cada vez más complejo, un autor podía imprimir el fruto de su trabajo intelectual y encargarse él mismo de su comercialización, o bien ceder su explotación, bajo diversas modalidades de convenio, a un impresor-librero.

 

Poco a poco, comenzó a definirse en la segunda mitad del siglo XIX la figura del editor: alguien que bajo su propio riesgo publica y vende una obra cedida por su autor a cambio de una remuneración o tasa y bajo condiciones estipuladas en un “contrato de edición”. La estereotipia y otras mejoras técnicas facilitaron los trabajos de reimpresión y el aumento del número de ejemplares de cada tirada, convirtiendo así en una mercancía cotizada la obra de aquellos autores que tenían garantizada las ventas de sus libros. Este fue el caso de algunos escritores extremeños, que no dudaron en recurrir a empresarios foráneos para comercializar sus obras. El ejemplo más claro es Felipe Trigo: sus novelas se convirtieron en una fuente continuada de ingresos para Renacimiento, la editorial madrileña que consiguió hacerse con su exclusividad a cambio de una cantidad mensual que liberaba al escritor de preocupaciones materiales.

 

Pero no sólo los creadores gozaron de este trato preferente. Tenemos también el caso de un ilustre representante del krausismo, el catedrático extremeño Urbano González Serrano, que llegó a percibir de la editorial Hernando un monto de 44.900 reales por cinco manuales y libros de texto de las asignaturas a su cargo (psicología, lógica y ética). También figuraba en el cátalogo de la casa Hernando -un célebre industrial especializado en libros y material educativo- el erudito extremeño Vicente Barrantes. En contrato firmado ante notario el 25 de abril de 1866, Barrantes cedió durante siete años por 15.000 reales, sus derechos sobre el popular libro de lecturas Plutarco de los niños, si bien se comprometía a retirar los ejemplares no que no se vendiesen a razón de 2 reales ejemplar. No hubo necesidad: el conservador Barrantes, especialista en conseguir subvenciones y asegurarse un mercado cautivo, tenía comprometida con el Ayuntamiento de Madrid una venta trimestral a razón de 4,90 pesetas ejemplar.

 

Pero mientras estos extremeños de proyección nacional cerraban sus contratos con las grandes editoriales del momento, otros autores que se movían en el ámbito regional seguían recurriendo a diversas formas de autoedición. En la mayoría de los casos el autor encargaba al impresor-librero su realización material, reservándose para sí los derechos de explotación, por lo que a veces, para evitar fraudes, los ejemplares se vendían autorizados con su firma autógrafa. Esta precaución era usual en los libros de texto, los únicos que alcanzaron en Extremadura grandes tiradas y reportaron algún beneficio a sus autores.

 

En la edición y comercialización de libros escolares se halla el origen de la primera “casa editorial” extremeña con proyección nacional, fundada en Serradilla (Cáceres) por Agustín Sánchez Rodrigo (1870-1933). En efecto: el 2 de abril de 1904 Ángel Rodríguez Álvarez cedió a Sánchez Rodrigo los derechos de un método de enseñanza de la lectura por la escritura. Este último se comprometía a invertir la cantidad de 2.250 pesetas en la primera edición, abonando al autor el diez por ciento del precio de cada ejemplar vendido. Al parecer, la operación fue cuidadosamente planificada por el editor. Se hizo con las direcciones de los maestros de toda España y de cuantas instituciones o personalidades tenían acreditada su opinión en cuestiones de pedagogía, y a todos les hizo llegar un ejemplar del nuevo método que habían tenido el acierto de bautizar con el eufónico y rotundo nombre de rayas. Así se gastaron casi todos los ejemplares de la primera tirada, cuyos pliegos se había mandado imprimir en Madrid, aunque la encuadernación para abaratar costes se hiciese en Serradilla. Este pueblo, además de pequeño, estaba entonces apartado de toda ruta, no llegaba a él ferrocarril ni carretera. Cuando Sánchez Rodrigo se decidió a montar su propia imprenta, la Minerva movida a pedal (tampoco había fluido eléctrico en Serradilla) tuvo que trasladarse a lomos de caballería desde la estación de Miravel. La empresa parecía cosa de locos, pero contra todo pronóstico triunfó: el 8 de junio de 1905 el método Rayas recibió aprobación oficial y cuatro años más tarde se adoptaba para la educación del Príncipe de Asturias. Se ha dicho con razón que tres generaciones de españoles aprendieron a leer con él, y hasta que dejó de utilizarse en los años setenta, se calcula que llegaron a venderse más de cincuenta y cuatro millones de ejemplares.  (...)