La creación de la AEEX surge de la inquietud de un grupo de escritores extremeños en un momento de ruptura y afirmación, que coincide y tiene mucho que ver con otro momento fundacional de la literatura extremeña como hoy la entendemos. Durante el II Congreso de Escritores Extremeños celebrado en Badajoz el 17 de abril de 1982 surgió el Manifiesto palmario, horrible, pero necesario, contra el arte rupestre del siglo XX en el oeste de España. Su tenor literal era el siguiente:
El mismo fue rubricado por: José María Bermejo, Vicente Sabido, Tomás Martín Tamayo, Felipe Núñez, Álvaro Valverde, Yolanda Gómez, Jesús Alviz, José Luis García Martín, Carlos Medrano, L. Pacheco, Ángel Campos, José María Lama, Estaban Cortijo, Javier Pérez García, José María Ródenas Pallarés, María Rosa Vicente, Alfredo Gordillo, María José Flores, J. Ramírez Lozano, Jaime Álvarez Buiza, José Manuel Fuentes García, Miguel Romero Carmona, Fernando León Rejas, Gregorio González Perlado y José Miguel Santiago Castelo
El 1 de diciembre de 1983 se celebró en Mérida la sesión constitutiva de la Asociación de Escritores Extremeños (AEEX). A la reunión asistieron José Alba, Jaime Álvarez Buiza, Carmelo Arribas, Eduardo Barajas, Manuel Calderón, Ángel Campos Pámpano, Bernardo Víctor Carande, Moisés Cayetano Rosado, Esteban Cortijo, Francisco Croche de Acuña, Jesús García Calderón, Juan García Gutiérrez, Antonio Gómez, Manuel Vicente González, Gregorio González Perlado, Rosa María Lencero, Fernando León, Pedro de Lorenzo, Elías Moro, Antonio Pacheco, Manuel Pacheco, Ángel Sánchez Pascual, José M.ª Ródenas Pallarés, Aurelio Velasco y José Antonio Zambrano. Por carta o de palabra se adhirieron también a la misma Eva Callejo, Pureza Canelo, Jesús Delgado Valhondo, José Antonio García Blázquez, Norberto López García, Soledad López Lago, Luis Martínez Terrón, Vicente Hernández Ponciano, Arsenio Muñoz de la Peña, Pablo Nogales y Juan Antonio Pérez Mateos. De la misma salió el primer comité ejecutivo formado por Bernardo Víctor Carande (Presidente), Ángel Sánchez Pascual (Secretario), Moisés Cayetano Rosado (Tesorero), Manuel Pecellín Lancharro (vocal) y Gregorio González Perlado (vocal). El 24 de marzo de 1984 se nombra también vocal a Antonio Gómez, y cuando Gregorio González Perlado en junio es nombrado director de la Editora Regional, se nombra vocal en su sustitución a Esteban Cortijo.